

¿Los alimentos no te duran mucho tiempo a pesar de guardarlos en la refrigeradora? Quizás es porque los estás guardando mal. Es importante saber en qué lugar deben ir los diferentes tipos de alimentos que guardes. Si lo haces bien la temperatura se distribuirá mejor y así recibirán una mejor temperatura que los hará mantenerse frescos por más tiempo.
Las refrigeradoras tienen diferentes secciones y compartimentos que están diseñados para una mejor preservación de los alimentos. Vamos a contarte qué debes poner en cada una conseguirlo.
La puerta es la zona menos fría. Es la ideal para conservar huevos, cremas (mayonesa, mostaza, etc.) mantequillas y mermeladas. También puedes conservar aquí diferentes bebidas como agua, juegos y leche.
La parte superior es la dedicada a los productos listos para consumir como pastas cocinadas o embutidos. Coloca ahí lo que planees consumir próximamente, es una buena idea poner ahí lo que está cerca a caducar para que recuerdes consumirlos antes de que venzan.
La zona media es ideal para los quesos, leche, yogures que no necesitan mucho frío. También puedes conservar los productos abiertos o comida de otros días.
En la zona baja guarda los productos crudos como la carne. Estas requieren las temperaturas más bajas y estables. Con esto también evitas que cualquier goteo de estas contaminen otros alimentos. Te recomendamos poner las carnes en recipientes para que no goteen.
Los cajones están diseñados para conservar todo tipo de verduras y frutas que necesiten refrigeración. Si las guardas sin bolsas ayudarán para que respiren.
Ya vimos que es importante la ubicación de los alimentos dentro de la refrigeradora. Pero hay que tener en cuenta algunos detalles más para una mejor experiencia.
Asegúrate que su temperatura oscile entre los 3° y 5° C.
Nunca guardes comidas o bebidas calientes ya que pueden alterar el estado de los demás productos que guardes.
No llenes la refrigeradora por completo. Los alientos también necesitan su espacio para respirar y conservarse mejor.
Mantenlos siempre limpios. Trata de hacerle limpieza al menos una vez al mes. Así podrás observar que alimentos están por vencer y si ves algo derramado, límpialo, así evitarás que otros alimentos se contaminen.