Servir tus pasteles dentro de las primeras 24 horas después de hornearlos asegura que tus clientes disfruten de la máxima frescura y sabor, además fortalece la percepción de tus productos como premium, pero… ¿Qué pasa si necesitas almacenarlos por más tiempo?
Hay que toma en cuenta que prolongar la vida de un pastel puede ser muy benéfico: ahorras tiempo y eventualmente hay más ganancias, además de que aprovechas mejor el uso de tu equipo para panadería y pastelería, utensilios e ingredientes.
Así que, queremos que encuentres el equilibrio: que ganen tus clientes, pero también tu negocio. Con estas recomendaciones para almacenar pasteles podrás mantenerlos siempre disponibles:
Cubre o envuelve tus pasteles
Protege el producto para evitar que pierda humedad, ya que al estar expuestos, es más probable que se sequen al ser almacenados.
Esta práctica es fundamental tanto para pasteles simples como para aquellos con coberturas delicadas o rellenos que son sensibles a la sequedad. Otras ventajas de protegerlos incluyen:
- Mantener la presentación atractiva del producto para atraer y retener a clientes exigentes que valoran tanto la calidad como la apariencia de lo que consumen.
- Una vez cubiertos son más fáciles de manejar y transportar, ya que están protegidos contra daños físicos y cambios ambientales que podrían afectar su frescura.
- Minimizas la necesidad de desechar productos secos o deteriorados, lo cual representa un ahorro directo en costos de materia prima y mano de obra.
Congela el pastel cuando necesites almacenarlo por más de 5 días
Congelar un pastel correctamente es clave para preservar su frescura y sabor. Sigue estos pasos detallados para asegurar resultados óptimos:
Paso 1: Dejar enfriar el pastel
Permite que se enfríe por completo una vez que lo retires del horno. Esto asegura que se libere todo el vapor de su interior, lo cual es crucial para mantener su textura al congelarse.
Paso 2: Envolver el pastel
Para proteger el pastel contra la humedad y el frío intenso del congelador, sigue estos consejos:
- Cubre el pastel cuidadosamente con al menos tres capas de film transparente. El film ayuda a sellar el pastel y evitar que se seque o absorba olores.
- Después de cubrir con film, envuelve completamente el pastel con papel de aluminio. Esto proporciona una capa adicional de protección contra el frío y asegura que el pastel conserve su frescura y sabor.
Paso 3: Almacenamiento en bolsa con cierre
Coloca el pastel envuelto en una bolsa con cierre hermético. Estas bolsas son prácticas y ocupan menos espacio en el congelador que los recipientes.
Toma en cuenta la temperatura ambiente
Aquí tienes 8 recomendaciones detalladas para gestionar la temperatura y asegurar que tus productos se mantengan en perfectas condiciones:
- Para evitar que la cobertura se derrita y que el pan se seque, es esencial mantener los pasteles en un ambiente fresco.
- Pasteles con coberturas delicadas como buttercream, ganache, y fondant son especialmente susceptibles al calor. Un ambiente demasiado caliente puede arruinar tanto la apariencia como el sabor de estos pasteles.
- Durante el verano o en cocinas que tienden a calentarse, es importante refrigerar los pasteles. Esto ayuda a preservar su frescura y estructura.
- Antes de servir, saca los pasteles del refrigerador y déjalos reposar a temperatura ambiente durante 30 a 60 minutos. Este tiempo permite que el pastel recupere su suavidad y que la cobertura alcance una textura óptima para el consumo.
- En días extremadamente calurosos planifica hornear y decorar pasteles en las horas más frescas del día, como temprano en la mañana o tarde en la noche.
- Si necesitas transportar pasteles, utiliza contenedores aislados o refrigerados para mantener una temperatura constante y evitar que se dañen durante el traslado.
- Usa termómetros para monitorear la temperatura de tu cocina y áreas de almacenamiento.
- Considera el uso de ventiladores o aire acondicionado para mantener una temperatura ambiente adecuada
Monitorea el exceso de humedad
La humedad, ya sea del ambiente o del proceso de enfriamiento de los pasteles, puede ocasionar que el fondo de pastel esté muy húmedo.
Para solucionarlo, enfría completamente los pasteles en una rejilla de metal antes de cubrirlos y almacenarlos, para permitir que la humedad se evapore antes.