El suspiro limeño es un postre icónico de la gastronomía peruana, que tiene su origen en la ciudad de Lima. Esta delicia es una mezcla perfecta de dulce de leche, merengue y canela, que se derrite en la boca y hace suspirar a cualquiera que lo prueba. Su historia se remonta al siglo XIX, cuando las monjas del Convento de Santa Rosa lo prepararon por primera vez.
Desde entonces, el suspiro limeño se ha convertido en un postre tradicional que se sirve en las celebraciones más importantes de la cultura peruana. Hoy te presentamos su receta fácil y deliciosa, para que puedas prepararlo en casa y disfrutar de su sabor único. ¡Manos a la obra!
1 lata de leche condensada, 1 lata de leche evaporada, 4 yemas de huevo, 1 rama de canela, 1 cucharadita de esencia de vainilla, 1 taza de azúcar (200 gramos), 1/2 taza de agua (120 mililitros), 4 claras de huevo, 1 pizca de sal.
Comenzaremos preparando el dulce de leche. En una olla grande, coloca la lata de leche condensada y cubre completamente con agua. Cocina a fuego medio durante 3 horas, asegurándote de que la lata esté siempre sumergida en agua. Retira del fuego y deja enfriar completamente antes de abrirla.
En una olla mediana, mezcla la leche evaporada, las yemas de huevo, la rama de canela y la esencia de vainilla. Cocina a fuego medio bajo, revolviendo constantemente con un batidor de mano, hasta que la mezcla espese y tenga una consistencia similar a la de un flan. Retira del fuego y deja enfriar.